HOTEL-CARCEL en Letonia
5/16/2012 11:02:00 a. m.Ayer tuve una especie de síndrome de Estocolmo mientras me informaba para hacer este post. Me enteré de que en el colmo de creatividad y búsqueda de target turístico se estaban creando hoteles en antiguas cárceles, y que el tipo de usuarios que allí acudían eran adeptos al turismo extremo. Googleando me entero de las cuatro o cinco que existen, hasta que doy con la de KAROSTAS , en Letonia, que es la que además te propone distintos programas de masoquismo para que realmente te puedas sentir como un prisionero, y encima del régimen comunista soviético. Es decir todo un lujo de experiencia que ni Kafka se la hubiera imaginado.
Me empezó a dar un "morbo" tremendo interiorizarme sobre los recovecos del alma humana que puede llevar a unos individuos a crear semejante proyecto y mucho más a otros a querer autoflajelarse en este tipo de aventura, pero lo más increíble de todo esto es que a medida que avanzaba en los detalles oscuros en el que los letones basan su propuesta turística, me dí cuenta de que cada vez tenía más ganas de participar en ella. Al punto que me ví buscando opciones para llegar a Riga, o ver si podía dar el salto vía ferry a Liepaja desde Suecia q probablemente sea mi destino de este verano.
El Hotel cárcel se encuentra en esa localidad costera del Báltico, y está en un fuerte que custodiaba este estratégico puerto. Funcionó desde la época zarista hasta que en 1997 se propuso reciclarla y encontrale un propósito turístico, advirtiéndole a los usuarios que el edificio fue concebido para "romper la vida de la gente y su libertad".
Los directores de marketing te proponen alojarte en las celdas que están prácticamente mantenidas como en la 2a guerra mundial, con sus camastros de hierro, por supuesto sin calefacción ni agua caliente, y los manjares que te ofrecen para sentirte un conspirador del Stalinismo son sus potajes y potingues.Por dormir de este modo sólo cobran 11,50€
Pero si con pasar una noche en una celda no tuvieras suficiente, te preparan también una experiencia más intensa que denominan EXTREME NIGHT. Para vivirla, debes firmar un acuerdo en que te sometes a las reglas del juego que consisten en que a partir de cruzar la puerta te conviertes en un PRISIONERO suceptible a aceptar las órdenes "abusivas" que te den. Su desobediencia puede estar penada con ejercicios físicos duros o limpieza de retretes, incluso con la expulsión del Centro. Pero te advierten que son simplemete pautas de un "juego" para entender el régimen de la época. Obviamente parte del juego es pasarte la noche en un calabozo, o entre rejas, con un cuidador que seguramente te insultará y humillará. Este juego cuesta 18€, y aceptan también grupos de estudiantes adolescentes.
Para los que no se atreven a algo tan duro, hay otra experiencia que se llama ENTRE REJAS, en la que sólo participas en juegos audiovisuales interactivos para sentir en tus venas el terror de la prisión.
O sea, una delicia de turismo.
0 comentarios