La opción de entrar en Suecia por el sur y no pensar en Estocolmo era una posibilidad de conocer el país más en profundidad, alejándonos de los tópicos y de los reportajes de viaje que nos muestran las imágenes más bellas de los destinos.

La meta de mi viaje, en realidad, era un Crucero por los Fiordos Noruegos que salía de Copenhague, y entonces cuando miras el mapa, empiezas con el "ya que estamos por aquí"......, ves que está frente a Malmö, y que ahora puedes ir "por tierra" por el famoso puente que cruza el estrecho de Eresund. Así que juntando esta inquietud con la casualidad  de que mi amigo Miguel se encontraba en Suecia reviviendo sus 10 años de exilio en Malmö....... la decisión estaba servida.

Alquilamos el coche desde el aeropuerto de Copenhague que se encuentra prácticamente en las puertas del puente, asi que apenas se sale de la terminal aérea encuentras la salida a la autopista hacia Malmö, que queda a 30 km . Sin embargo el puente tiene sólo 8475 m, más un túnel y una isla que completan  los 16 km de distancia que separan ambas costas.

Este puente es una de las obras de alta ingeniería que existen en el universo, y su función es terminar uniendo una parte de Europa  que quedaba descolgada del territorio continental, y a la que ahora se conecta  por autopista y por tren.  El impacto de la obra sobre la región ha sido tan grande que tuvo que anularse el servicio de ferry que unía las dos orillas , cosa que no ocurrió ni siquiera en el Eurotunel en  el canal de la Mancha.

Cruzar el túnel en coche es carísimo y tengo que confesar que me ocurrió una novatada. Yo no consulté previamente cuánto costaba cruzarlo, pero cuando lo hice, metí mi tarjeta de un modo natural, viendo que el peaje era de 395 SEK, y haciendo un cálculo decimal mal hecho, pensé que costaba 3,90€ y resulta que eran 39 € de ida, y otros tantos de retorno. De todas maneras,  los que lo cruzan habitualmente , tienen hasta un 75% de reducción. Éstos no son pocos, ya que uno de los cambios socio-económicos de la región es que muchos ciudadanos de Copenhague han comprado sus viviendas en Malmö , ya que el precio es menor, y  cruzan el estrecho todos los días.

Pero para éstos seguramente sea más conveniente el tren, que desde el 2000 cuando se inauguró el cruce, tiene frecuencia de cada 20 minutos, y aunque con menor frecuencia el servicio no se detiene en las 24 horas. Curioso también es enterarse de que el tren va por debajo de los carriles de la autopista, detalles que ningún claustrofóbico debiera saber. Menos mal que tampoco me enteré que el primer tramo de la obra saliendo por el lado danés  es un túnel que se hizo tan profundo como para que por encima pudieran pasar los barcos que transitan por el ORESUND.

A propósito debo decir que a mí las obras de ingeniería de este calibre me angustian un poco ya que son una puja ente la naturaleza y la inteligencia humana . Me impactan las obras que le ganan terreno al poderío del agua, sino mirar el modo en que se sumergió el túnel, cuyos paneles fueron construídos en Cádiz.

La circulación es absolutamente relajada, ya que hay muy poco tráfico, y una curiosidad con respecto a la velocidad permitida es que tiene un sistema variable, que estipula el límite máximo en función de la climatología y las horas del día.