Tuve la suerte de tener un City Pass  de Copenhaguen para sacarle máximo partido a esta ciudad maravillosa , meca escandinava, pero infinitamente europea y cosmopolita. Con ella podía visitar todos los Museos que quisiera, y pasear infinitamente en transporte público o en los barcos turísticos, pero mi segunda mañana en esta urbe impactante la dediqué al SMK , Statens Museum for Kunst, o sea, el Museo de Arte Moderno,  para ver la exposición temporal de Matisse, denominada "Doubles and Variations".

Como en todo gran museo sentí al entrar esa sensación tan magnífica que dan estos espacios dedicados al arte, no sólo por lo que albergan, sino porque es ese momento en el que dedicas y "te"dedicas un tiempo para disfrutar arte.

Entre tanta oferta museística, por qué elegí el SMK? La razón inicial era la muestra temporal de este pintor impresionista, , y la segunda poder continuar viendo arte contemporáneo escandinavo, mettier que había iniciado en Gottemburgo en el Museo de Arte Moderno, y que me había encantado.

El Museo no es sólo lo que ves,sino la experiencia integral . Y desde el inicio entrar en el SMK fue un tratamiento de mimo. Por empezar, para ver la muestra de Matisse, te prestan la guía digital en un ipad, para lo que debes dejar cualquier tarjeta en garantía.. La guía viene en danés y en inglés, y luego de la introducción te explica el contenido de la exposición y relata a través de su recorrido cómo el pintor francés usó la repetición de un mismo tema como método.

Los Ipads con la audioguía de la Exposición

Así podemos disfrutar de varios duetos de imágenes de Paris desde la ventana de su estudio, las prodigiosas bailarinas del vientre, o las entonces llamadas Odaliscas.




En la muestra se puede ver cómo a través de las repeticiones experimentaba distintas técnicas y colores, un método comienza a principios del siglo XX y que llega a su máximo desarrollo en 1940.

Este sistema o casi podríamos llamarle "manía" de multiplicar temáticas la comienza Matisse a utilizar en la escuela de "Beaux Arts" para analizar las técnicas de otros maestros ,e incluso de sus contemporáneos, lo que le valió más de una crítica. Era también para él un modo de continuar un diálogo con sus pinturas iniciales, algo que a lo largo de su carrera se convirtió en una especie de obsesión. Así en los años 30 trabajaba con un fotógrafo al que le iba haciendo tomar instantáneas de las diferentes etapas de un cuadro suyo.

Éste modo de crear lo desarrolló en distintas formas, tanto en naturalezas muertas como en reetratos. En esta exposición se pueden apreciar en las primigenias imágenes que se veían desde la ventana de su estudio en el Pont St. Michel, como en sus multiples desnudos femeninos.

Temas y Variaciones

La muestra de Matisse estará expuesta hasta el 28 de octubre , y cuesta 12€, y está incluída en las visitas que puedes realizar adquiriendo el CITY PASS.