Es una de las 5 ciudades más bellas de Europa y casi seguro está entre las 10 más bonitas del mundo. Todo queda a gusto de quien la mira, pero Budapest es sin duda una de esas urbes impactantes, que aunque vienes prevenido de su belleza , te sorprende aún más.
Son muchos los momentos en que caminarás por la ciudad sintiendo ese golpe de belleza, un golpe casi sublime, que te cuestiona las realidades de los habitats urbanos. ¿Viviría aquí? te preguntas y el sí sale rotundo. A pesar de las complicaciones que tendría moverse en un entorno que habla una lengua tan difícil, seguramente vivir en Budapest una etapa de tu vida puede ser fascinante.
Todo parece fácil en esta ciudad que se articula a lo largo del mítico río Danubio. Un río que todos queremos ver una vez en la vida y aunque no es azul, se le ve potente y poderoso, a la vez que sabemos que es una corriente de agua que conecta toda Hungría y parte de los países del Este, con paisajes bellos y melodías acuáticas.
Todos saben ya que Budapest es la suma de Buda+Pest, y en efecto son dos contextos diferentes en cuanto se enfrentan al río, pero que completan una fisonomía que permite espiarse unas a otras. Buda es de costa estrecha y a pocos metros del río comienza a coger altura en lomas que te van permitiendo mirar a Pest desde lo alto. Si no la vives, Buda es más un decorado que puedes apreciar desde el otro lado, con sus edificios neoclásicos por un lado, y muy en lo alto el Castillo que define mucho a la ciudad, tanto desde abajo como cuando subes a visitar esa parte de la ciudad.
Del otro lado, Pest es inconmensurable con el efecto que provoca el edificio del Parlamento, un edificio exquisitamente proporcionado con toques goticos y neogoticos que marca la fisonomía de la ciudad y se convierte en su icono. Impenitente en su belleza, quieres verlo a cada momento, desde el río , desde Pest, desde Buda, y por supuesto de día y de noche. No sucumbe a su belleza y es una de las joyas arquitectónicas de la humanidad. Lo más delicioso que brinda esta ciudad es que el edificio no está acorazado, puedes disfrutar de él desde muy cerca, acercarte , tocar sus paredes, y por supuesto entrar a visitarlo, en unas visitas pautadas, que en verano, están un poco saturadas. Pero basta con reservar on line, y tienes asegurado tu puesto.
El barrio del palacio legislativo es un barrio aristocrático y caminarlo permite hacerte con la idiosincracia de la ciudad. Es una zona de embajadas también y puedes encontrarte sorprendentemente con una estatua a Ronald Reagan, a quien en los países del este se lo venera como uno de los artífices de la caída del comunismo. También en este barrio hay un espacio para la memoria, de esos que me gustan a mí, ya que en ellos son los ciudadanos los que ponen cositas para recordar a las víctimas del holocausto.
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| A pocos metros del Parlamento y del Danubio |
Este barrio tiene buenos restaurantes y bares con estilo en los que encontrarás "nativos" viviendo la ciudad.
Y si volvemos al río, no podemos dejar de hablar de sus puentes, que también son una seña de identidad de esta ciudad. Budapest no tendría la gran belleza, la armonía y el equilibrio visual que tiene sino fuera coloreado por los increíbles puentes que la unen, y que son de pasaje obligatorio. A pie, en tranvía, en coche, en bicicleta, te brindarán siempre ángulos , espacios para fotografiarte, visiones de ambos lados del río que serán únicas, y siempre dan un apunte personal a el dibujo de esta impresionante urbe. A nosotros nos gustó más el Szabadság (Libertad) que el promocionado puente de Las Cadenas.
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| Espectacular el Puente de la Libertad |
Otra de las señas de identidad de esta ciudad son sus baños. Catalogada como el Spa de Europa, Budapest disfruta de aguas surgentes termales desde tiempos inmemoriales. Las han disfrutado desde los romanos, y todas sus épocas han sido usufructuadas por monarcas , invasores y ciudadanos de a pie.
La administración local consciente de esas virtudes está atenta en el inconmesurable valor de estas aguas, de su cultura de baños, que es lo que la hace a Budapest más curiosa -si cabe- como ciudad, e invierte fondos en restaurar y mantener baños públicos como el Lukacs, o en apoyar al legendario y de nombre imposible para nuestra lengua, como al Széchenyi.
5 Consejos para Budapest
- Budapest Card
La adquieres en las oficinas de Turismo y puedes tenerla por 24, 48 , 72 , 96 o 120 horas. La principal ventaja y que te hace desentender de todo es que accedes gratis a todos los medios de transporte, y no te puedes ir de Budapest sin subirte a un tranvía. También tienes el 20% de descuento en los Bus Hop On Hop Off. También accedes a los buses eléctricos que te llevan al Castillo.
Tienes acceso gratuito a un baño en el Balneario Lukacs en Buda, un lugar que te permitirá bañarte con gente local, y olvidas que eres un turista.
Tienes dos tours Free Tours gratuitos por Buda y por Pest, en los que el pago al guía está incluído.
Puedes consultar más ventajas y descuentos en Budapest Card.
- Bañarse en el Hotel Gellert , en Szechenyi o Lukacs.
La primera opción es un Must de Budapest, te bañes o no te bañes, has de visitar este hotel legendario, que marca el estilo de una época. Los baños son los que salen en las fotos y con los que siempre has soñado. No están muy saturados de turistas, y las condiciones higiénicas son bastante aceptables.
Una vez en la vida hay que bañarse en Szechenyi, pero es mucho más recomendable en invierno que en verano.
Lukacs tiene el encanto de ser muy local, hay más habitantes de la ciudad bañándose que turistas y eso te da una percepción particular, tiene una piscina exterior para nadar a temperatura ambiente y otra a temperatura bastante fría. Luego otra más juguetona con corriente y chorros. Los de interior son impresionantes, sientes la verdadera potencia de las aguas termales.
- Navegar por el Danubio
Todos tenemos la fantasía del Danubio Azul que no es azul , pero es igualmente hermoso. Sea como sea has de darte un paseo en barco: dentro del pack hop on hop off, pagandolo sólo, con cena, sin cena, con música sin música, de día , de noche. Es algo obligatorio, no sólo porque tendrás unas vistas únicas de la ciudad, sino porque se extienden más allá de la zona central, y puedes ver otros aspectos de la ciudad real, como su zona universitaria, o barrios aledaños.
- Visitar el mercado
Hermoso edificio al lado del Puente de la Libertad que responde a la época en la que cada ciudad se construía un Mercado Central. Inaugurado en 1897 con estructura interior de hierro , y de estilo historicista por el exterior , este lugar es imprescindible en tu paso por Budapest, sobre todo si es invierno. Tal vez en verano deberás solo pasearlo, porque lo de comer ahí es un poco caluroso, y acaso ya sólo volcado al turismo. El arquitecto Samu Pecz eligió decorar su exterior con baldosas de pirogranito de la famosa fábrica húngara de Zsolnay, y su belleza general lo convirtió en el Mercado más bello de Europa en 2013 según una encuesta de la CNN.
Viajar en Tranvía
Budapest es una ciudad que mantiene la red de tranvías antiguas, y el transporte público casi en su mayoría usa energía eléctrica. Todavía se mantienen los Trolleybus.
No has estado en Budapest si no has subido a un tranvía. Recomiendo sobre todo el recorrido en la línea 19 a lo largo del Danubio del lado de Buda, que vas disfrutando toda la vista de Pest.
Y los Museos, pero los museos nosotros los dejamos para el invierno
- 8/18/2018 11:14:00 a. m.
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